Laura Ceballos
Editora en JefeLe encantan las historias cuyo personaje principal es la comida. Ha colaborado como content manager y editora en marcas como Grupo Imagen, Canasta Rosa, Olé Interactive y Clarins. Tiene un proyecto en redes llamado @foodiecuriosa en donde cocina y narra.
La ensalada de papa alemana, conocida en Alemania como Kartoffelsalat, es mucho más que una guarnición: es un verdadero clásico de la cocina europea — versátil, fácil de preparar y perfecta para cualquier época del año.
La base de la ensalada es, por supuesto, la papa. Pero el secreto está en el aderezo, elaborado con caldo de verduras caliente, vinagre, cebolla, mostaza y especias. Esta mezcla penetra en las papas aún tibias, aportando profundidad de sabor sin necesidad de mayonesa.
Esta versión es más ligera, vegana y mucho más equilibrada desde el punto de vista nutricional, además de tener una mayor duración en el refrigerador.
Caliente o fría: una ensalada versátil
Una de las grandes virtudes de la ensalada de papa alemana es su versatilidad. Puedes servirla tibia, recién hecha, como guarnición para carnes a la parrilla, salchichas o un tradicional schnitzel (milanesa)
O dejarla enfriar y servirla como ensalada fría en un picnic o asado veraniego. Esta cualidad también la hace ideal para quienes prefieren cocinar con antelación: el sabor mejora tras algunas horas de reposo.
¿Qué papa elegir para preparar esta ensalada?
Para que la ensalada mantenga la textura adecuada, lo ideal es usar papas firmes y con poca humedad. En México, la papa roja es una excelente opción porque no se deshace al cocerse y conserva su forma al cortarla en rodajas.
Evita las papas muy blandas o harinosas, ya que tienden a romperse al mezclarlas con el aderezo.
Lava bien las papas y colócalas enteras en una olla con agua fría.
Lleva a fuego alto hasta que hierva, luego baja el fuego y cocina por 20 a 25 minutos, o hasta que estén tiernas.
Mientras tanto, calienta el caldo de verduras junto con la cebolla picada y deja hervir durante 2 a 3 minutos.
Apaga el fuego y agrega el vinagre, la mostaza, la sal y la pimienta. Mezcla bien.
Deja enfriar las papas lo justo para poder manipularlas.
Retira la piel y córtalas en rebanadas finas de unos 0,5 cm.
Colócalas en un bowl grande.
Vierte el aderezo aún caliente sobre las papas y mezcla con cuidado para que absorban el líquido sin romperse.
Deja reposar unos 15 minutos para intensificar el sabor.
10 Rocía con el aceite de girasol y espolvorea el perejil fresco.
- Ajusta la sal y la pimienta si es necesario, mezcla suavemente una vez más ¡y listo!
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Artículo original de Tudo Gostoso.
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