El mestizaje entre las culturas mesoamericanas y europeas se encuentra muy marcado en algunas de las recetas más antiguas y tradicionales de nuestro México, tal es el caso del pan de pulque.
El pulque es una bebida característica de las sociedades precolombinas en el antiguo México, este se consideraba como una bebida espiritual, por lo que se ganó el sobrenombre de la bebida de los dioses; el trigo por su parte, es uno de los cereales que adoptamos del viejo mundo y que en la actualidad se ha vuelto un ingrediente esencial de la gastronomía mexicana.
Antiguamente el pulque era usado como agente para lograr fermentar la masa, se utilizaba para realizar panes de todo tipo y de consumo cotidiano en los estados del centro de la República; en la actualidad, la creación del pan de pulque es más una tradición festiva que una necesidad, este es muy común en las fiestas de pueblo de los estados de Tlaxcala, Estado de México, Hidalgo, Querétaro y Puebla.
Para hacer esta receta necesitarás utensilios básicos de repostería que normalmente podemos encontrar en todas las cocinas, esta vez utilizaremos una batidora, un molde pastelero y el horno convencional de tu cocina.
- Horno de cocina 4,499 pesos
- Batidora 379 pesos
- Molde pastelero 384 pesos
Fuentes | Larousse Cocina |
Foto | Pueblos México |
Antes de comenzar
- Separa las yemas de las claras de los 7 huevos y reserva.
- Derrite la mantequilla y mantenla en un lugar a temperatura ambiente.
- Cierne la harina por lo menos tres veces para que esta esté completamente limpia y sin grumos.
Para el pan de pulque
- Bate las claras junto con el pulque hasta que estas adquieran una consistencia esponjosa por lo menos 8 -10 minutos.
- Agrega poco a poco las yemas, el azúcar, la harina, la mantequilla y la levadura a tu mezcla sin dejar de batir.
- Cuando la mezcla sea completamente homogénea viértela en el molde pastelero.
- Hornea a temperatura alta (220 grados) por media hora o hasta que este haya inflado y este un poco dorado en la superficie.
