Típico, estás en la banda corredora y no puedes dejar de notar que el tipo de la derecha está sudando de tal manera que parece que salió de un río. ¿Por qué es que algunas personas sudan como locos y algunos apenas brillaban (yo soy de esos segundos!)?
El sudor es la manera en la que el cuerpo se enfría y mantiene una temperatura saludable. Nosotros nacemos con entre dos y cuatro millones de glándulas sudoríparas. Las mujeres tenemos más glándulas sudoríparas que los hombres, pero las glándulas de los hombres son más activas. La cantidad de sudor depende del género, el número de glándulas sudoríparas que tengas (más glándulas equivalen a más sudor), el calor que hace, con qué intensidad se hace ejercicio, o con que nivel de ansiedad estás entrenando.
La cantidad que una persona suda también depende de cuántas glándulas sudoríparas se activan y cuánto sudor se excreta de cada glándula. Los hombres sudan significativamente mucho más que las mujeres. La misma cantidad de glándulas sudoríparas podrían ser activadas, pero las mujeres producimos menos sudor de cada glándula.
Las personas que se ejercitan regularmente y se encuentran en forma, sudan de forma más "eficientemente", ya que lo hacen cuando su temperatura corporal es menor. Sin embargo, una persona sedentaria que entrena con la misma intensidad se calentará mucho más rápido y posiblemente sudará más. Además, las personas con sobrepeso sudan más intensivamente que los individuos con peso normal, ya que la grasa actúa como un aislante que eleva la temperatura central.
Otro factor que puede afectar la sudoración, es por ejemplo si eres bebedor de café, la cafeína puede aumentar la transpiración, por lo que si esto te está afectando demasiado, trata de cortar esa taza de café adicional después de la comida.
El consumo de alcohol puede tener el mismo efecto, por lo que si estás entrenando es mejor bajarle a los cocteles. Los fumadores también pueden sudar más ya que la nicotina puede afectar sus hormonas, la piel y el cerebro. El uso de telas sintéticas que atrapan el calor hará que te sientas más caliente, lo que te hará también más sudoroso.
Lamentablemente, algunas personas sufren de sudoración excesiva, una condición común llamada hiperhidrosis. Esto es como si un grifo de sus cuerpos se encendiera y sus palmas, pies, espalda y cara se bañan en sudor, incluso si hace frío o no se mueven. Si esto te suena familiar, consulta a tu médico para ver qué opciones de tratamiento están disponibles.
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