Con los cambios en el clima, la temporada de gripa ha llegado. La solución de muchas personas es ir a una farmacia y comprar un medicamento de venta libre para reducir los síntomas de fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta y dolor muscular. La gran mayoría de estos productos contienen paracetamol. Así que las personas que toman múltiples medicamentos para la tos y el resfriado común, están consumiendo una dosis de paracetamol mayor a la que se pueden imaginar.
El problema con el consumo en grandes dosis de este compuesto químico, es que puede causar toxicidad hepática inducida por paracetamol. El paracetamol es el ingrediente más utilizado en medicamentos para aliviar el dolor y reducir la fiebre. Es un ingrediente que se encuentra en muchos productos que no necesitan receta para su venta. La dosis a la que se produce toxicidad es a los 8,400 miligramos, lo que es mucho más elevado que la cantidad necesaria para que un adulto soluciones con eficacia sus síntomas (entre 650 a 1,000 mg).
Por otra parte, el paracetamol no causa los efectos adversos asociados con los fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) o los opioides. Por eso el paracetamol es conocido como un medicamento de libre venta, seguro y eficaz para el tratamiento del dolor y la fiebre. Hoy en día millones de personas consumen paracetamol. El problema es que muchas veces el paracetamol es un ingrediente activo en medicamentos, especialmente en aquellos diseñados para tratar las molestias de la gripa, y no nos damos cuenta. Por eso es importante leer las etiquetas.
El paracetamol se procesa principalmente en el hígado. El hígado descompone la mayor parte del paracetamol en una dosis normal y lo elimina por la orina. Una pequeña porción del fármaco se convierte en un subproducto tóxico para las células del hígado. Si se consume demasiado paracetamol, mucho a la vez o durante un período de varios días, este subproducto tóxico puede acumularse y causar daño en el hígado.
Existe evidencia de que las personas con deshidratación por vómitos o diarrea, fiebre persistente, o problemas previos en el hígado, pueden tener un ligero aumento en el riesgo de presentar daños en el hígado cuando se toman dosis seguras de paracetamol. Los síntomas resultantes son dolor en el lado derecho del abdomen, náuseas, vómitos y malestar general, lo que puede confundirse con una enfermedad similar a la gripe, en lugar de ser reconocidos como señales de daño hepático.
Por ejemplo, desde 1990, el fabricante de Tylenol, McNeil Pharmaceuticals, ha difundido las instrucciones para el uso seguro de este producto. Las etiquetas y los anuncios advierten de los peligros del mal uso de este medicamento. La dosis diaria máxima recomendada de paracetamol en adultos se ha reducido de 4,000 mg a 3,000 mg al día. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha recomendado que los productos de combinación no contengan más de 325 mg de paracetamol por cápsula.
Finalizando, el paracetamol es un fármaco seguro y muy eficaz. La gran mayoría de los pacientes que toman este medicamento para tratar los síntomas comunes de dolor y fiebre, encuentran alivio con el uso apropiado. Sin embargo, el público en general debe de siempre leer las etiquetas de cualquier producto para la tos, dolor o gripa, y detectar la cantidad de paracetamol que contiene el medicamento. De esa forma evitará consumir demasiado. Si no está seguro, puedes consultar a un médico para que te diga cómo utilizar con seguridad una combinación de medicamentos que incluyen paracetamol.
La mayoría de los casos de enfermedades virales, como el resfriado común y la gripa, mejoran por sí solas con el reposo, consumo de muchos líquidos, y con el tiempo.
Imágenes | Gilgongo | Matt Browne | Michelle Tribe |
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