Hacer pan en casa es algo maravilloso, aunque suele imponer un poco. Asusta leer una receta y encontrarse con términos como masa madre, larga fermentación, etc, pero ese no es nuestro caso. La receta de pan casero con harina de trigo común que hoy traemos es todo lo contrario. Perfecta para estrenarse en el mundo del pan y con mucho éxito.
Este pan siempre sale bien y no necesita . En poco más de una hora el pan que ves en la portada estará lista para ser devorado. En su elaboración usamos harina común, la del super de toda la vida, algo que resulta comodísimo. Una última cosa, la levadura fresca se puede sustituir por cinco gramos levadura seca de panadería. Si tienes ganas de hacer pan y quieres usar la freidora de aire, este pan de leche te va a encantar.
Una vez listo, podemos consumirlo en el día o rebanarlo para congelar e ir teniendo nuestro pan listo a medida que lo vayamos necesitando, que podemos combinar con opciones como el pan de molde, una francesa baguette o para un clásico sándwich. Después te puedes animar con panes más originales, como el pan integral.
Cómo aprovechar este pan casero
Este pan casero, que tendrás listo en menos de 1 hora, es perfecto para preparar platillos deliciosos como:
Molletes
Sándwiches de diferentes tipos como de atún, jamón y queso o huevo
Pan tostado cubierto de aguacate
Pan con mermelada
Pan con crema de avellana
Pan con queso crema y miel
Huevos benedictinos
Pan con mantequilla y azúcar
Introduce el agua templada en un recipiente amplio y hondo y añade la levadura fresca, desmenuzada o la levadura seca, y el azúcar. Remueve hasta que el azúcar y la levadura se integren por completo.
Añade la mitad de la harina y todo el aceite. Mezcla bien, procura aplastar los grumos que se formen, y deja reposar durante 20 minutos a temperatura ambiente, cubriendo el recipiente con un trapo limpio. La masa crecerá ligeramente y se llenará de burbujas.
Transcurrido el tiempo de reposo incorpora el resto de la harina, la sal y remueve hasta que no podamos más, porque se volverá muy espesa. Espolvorea la superficie de trabajo con harina y coloca la masa sobre ella. Engrasa tus manos con aceite y amasamos durante un par de minutos.
Forma una bola con la masa y la coloca sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal untado con un poco de aceite. Haz dos cortes en la superficie con un cuchillo afilado y, si quieres dar un aire rústico al pan, lo espolvoreamos con harina.
Embadurna con aceite el interior de un recipiente amplio y hondo apto para horno (hemos usado un bol de pyrex de 24 cm, pero se puede usar una cacerola o similar) y cubrimos con él la masa. Cocina en el horno, precalentado a 200 ºC con calor arriba y abajo, durante 45 minutos. Destapa y deja enfriar sobre una rejilla antes de consumir.
Receta original de Carmen Tía Alia, de DAP.
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