Maciel BG
EditoraRedactora especializada en multimedia y cultura. Me encanta la gastronomía, en especial la comida mexicana y la respostería.
Después de un fin de semana de antojitos, reuniones o comidas abundantes en grasas e irritantes, el cuerpo pide un respiro. Podemos dárselo con platillos ligeros, nutritivos y fáciles de preparar. Una de las mejores opciones es una sopa antiinflamatoria, una preparación cargada de vegetales de temporada que ayudan a desinflamar, depurar y ordenar tu organismo.
Esta receta de sopa casera combina ingredientes frescos y de temporada que aportan fibra, vitaminas y antioxidantes. Además de ser una comida reconfortante y fácil de digerir, puedes usarla como una receta de aprovechamiento, pues podrás usar todos los vegetales que tienes olvidados en el refrigerador. Esta sopa es perfecta para una cena ligera o un almuerzo saludable, lo mejor es que su preparación no toma más de 30 minutos.
Por qué esta sopa antiinflamatoria es perfecta para depurar el cuerpo
Esta sopa reúne ingredientes que no solo aportan sabor, sino también propiedades antiinflamatorias y depurativas. La calabaza y la zanahoria son ricas en betacarotenos y antioxidantes, mientras que los garbanzos ofrecen fibra para mejorar la digestión y favorecer la eliminación de toxinas. Además, el uso de aceite de oliva aporta ácidos grasos saludables que reducen la inflamación y mejoran la salud cardiovascular.
Sopa casera para desinflamar el cuerpo. Foto: Freepik
El toque especial de pimentón y alcachofas
Aunque las verduras principales aportan dulzura y suavidad, el pimentón ahumado añade profundidad y un ligero toque especiado. Las alcachofas, por su parte, aportan un contraste amargo que equilibra la dulzura de la calabaza y la zanahoria. Si quieres enriquecer el sabor de la sopa, puedes agregar especias y hierbas aromáticas.
Pimentón ahumado y alcachofas. Foto: Freepik
Por ejemplo, la cúrcuma es un potente antiinflamatorio natural que combina muy bien con la calabaza. El comino aporta un toque terroso y favorece la digestión de las legumbres. Las hojas de laurel pueden intensificar el aroma, mientras que un poco de jengibre fresco rallado dará un matiz picante y reconfortante. Esta sopa antiinflamatoria es perfecta para retomar los hábitos saludables sin sacrificar el sabor. Es económica, rápida y puedes adaptarla a lo que tengas en casa.
- Pela las zanahorias y córtalas en daditos, al igual que la cebolla, el tomate, la calabaza y los nabos.
- En una cacerola grande, vierte una buena cantidad de aceite de oliva. Incorpora la cebolla y saltea por 5 minutos.
- Añade la harina, la pizca del pimentón y mezcla.
- Incorpora las zanahorias y las calabazas, cúbrelas con agua. Tapa la cacerola y deja hervir todo a fuego lento por 20 minutos.
- Una vez que las zanahorias estén medio cocidas, agrega los nabos, tomates y los corazones de alcachofa previamente escurridos. Sazona con sal y cocina a fuego lento por 10 minutos más.
- Antes de apagar el fuego, añade los garbanzos previamente escurridos y remueve. Tapa la cacerola para que tu sopa antiinflamatoria no se enfríe.
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