¿Antojo de algo fácil pero delicioso? No te preocipes más, a continuación, te contamos cómo hacer como hacer lasaña de calabacitas y carne de res sin horno: rinde para 10 personas.
Esta receta es ideal para cuando tiene una comida o cena con amigos o familiares y buscas no pasar tanto tiempo cocinando, así que toma nota de los ingredientes para sorprenderlos.
Consejos para hacer la mejor lasaña con calabacín y carne sin horno
- Utiliza un mandolina para obtener láminas de calabacín de grosor uniforme. Esto garantizará una cocción pareja y evitará que algunas partes queden demasiado blandas o duras.
- Salpimienta ligeramente las láminas de calabacín antes de armar la lasaña. Esto realzará su sabor natural.
- Si prefieres un calabacín más tierno, puedes saltear ligeramente las láminas en una sartén con un poco de aceite antes de armar la lasaña.
- Para un sabor más intenso, puedes dorar la carne en la sartén antes de agregarla a la salsa.
- Experimenta con diferentes tipos de carne, como carne de cerdo picada o una mezcla de carnes.
- Incorpora otras verduras a la carne, como zanahoria rallada, pimiento picado o espinacas, para agregar más nutrientes y sabor.
- Ajusta la cantidad de especias y hierbas según tu gusto. Puedes agregar un toque de azúcar si la salsa te parece demasiado ácida.
- Si deseas una salsa más cremosa, puedes agregar un poco de ricotta o queso crema.
- Alterna capas de calabacitas, carne y salsa para obtener un resultado más rico y jugoso.
- Utiliza quesos de buena calidad, como mozzarella fresca y parmesano rallado, para un sabor más intenso y una textura más cremosa.
- Espolvorea queso entre cada capa y una capa generosa en la parte superior.
- Permite que la lasaña repose en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de calentarla. Esto permitirá que los sabores se mezclen y que la calabacita se ablande ligeramente.
- Al calentar la lasaña, asegúrate de que esté bien caliente en todo su interior. Puedes utilizar el microondas, una sartén grande o un horno a baja temperatura.
- Decora la lasaña con hojas de albahaca fresca o unas ramitas de perejil antes de servir.
- Puedes sustituir la carne por lentejas, tofu o champiñones para una opción vegetariana.
Ideas de guarniciones para acompañar la lasaña de calabacita y carne
- Ensalada: Una ensalada mixta con lechuga, tomate, pepino y aderezada con una vinagreta ligera es una opción refrescante y saludable.
- Pan de ajo: El pan de ajo, ya sea casero o comprado, es un clásico que combina a la perfección con la lasaña.
- Verduras al horno: Asar brócoli, espárragos, zanahorias o pimientos añade un toque dulce y caramelizado a tu plato.
- Puré de papas: Un puré de papas cremoso y con hierbas frescas es una guarnición reconfortante y clásica.
- Verduras salteadas: Saltea la calabacita, cebolla y pimientos en una sartén con ajo y hierbas aromáticas es una opción ligera y sabrosa.
- Ensalada caprese: Tomates, mozzarella y albahaca fresca en rodajas, aderezadas con aceite de oliva y vinagre balsámico, es una combinación clásica y deliciosa.

- Lava las calabacitas y córtalas en láminas finas a lo largo. Puedes utilizar una mandolina o un pelador de vegetales para hacer esto más fácil.
- Coloca las láminas en un colador, espolvorea con sal para que suelten el exceso de agua y déjalas reposar por 15-20 minutos. Luego, sécalas con papel absorbente.
- En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y sofríe la cebolla hasta que esté transparente.
- Añade el ajo y cocina por un minuto más.
- Incorpora la carne molida y cocina a fuego medio-alto hasta que se dore, desmenuzándola bien. Sazona con sal, pimienta, orégano y albahaca.
- Cuando la carne esté bien cocida, añade la salsa de tomate. Deja cocinar a fuego lento durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando.
- En una sartén profunda o cacerola grande (con tapa), coloca una capa de láminas de calabacita en el fondo.
- Agrega una capa de la mezcla de carne con salsa, luego esparce un poco de queso ricota o requesón y espolvorea queso mozzarella y parmesano.
- Repite el proceso: calabacita, carne, ricota, quesos, hasta que se te acaben los ingredientes. La última capa debe ser de quesos.
- Cubre la sartén o cacerola con una tapa hermética y cocina a fuego lento durante unos 20-30 minutos. Esto permitirá que la calabacita se cocine con el vapor y los quesos se derritan y se integren con los demás ingredientes.
- Vigila para asegurarte de que no se pegue en el fondo. Si es necesario, añade un Una vez que la calabacita esté suave y los quesos derretidos, apaga el fuego y deja reposar unos minutos antes de servir.
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