Convivimos minuto a minuto con la tecnología que nos acerca a los medios de comunicación y hoy en día es más fácil que un gran porcentaje de la población se encuentre siempre informada. Sin embargo, los medios tienen el poder de influir en nuestras decisiones y de acuerdo a un reciente estudio, también influyen en la manera que percibimos la obesidad.
Investigadores de la Chapman University, UCLA y Stanford en Estados Unidos, examinaron como los artículos presentados en los medios con diferentes perspectivas de la obesidad afectaban la manera en que las personas apoyan las diversas políticas publicas relacionadas con obesidad y los prejuicios sobre personas con sobrepeso.
Los hallazgos de los investigadores reportan que las noticias sobre obesidad como una crisis de salud publica, provocada por malas decisiones personales, están provocando un aumento en los prejuicios sobre personas con este problema y un incremento en los costos de cuidados médicos.
Los investigadores dieron a leer a un grupo de participantes cuatro artículos con distintas puntos de vista sobre la obesidad para ver si, después de leerlas, cambiaban su actitud.
- "Fat rights": este articulo enfatizaba la idea de que la obesidad es una forma positiva sobre la diversidad del tamaño corporal y que la discriminación y prejuicio es inaceptable.
- "Health at every size": este articulo hablaba sobre el hecho de que el nivel de grasa corporal esta débilmente asociado con la salud siempre y cuando el ejercicio y las decisiones alimentarias de la persona sean tomadas en cuenta. En pocas palabras, este punto de vista, alienta a las personas a hacer ejercicio y cuidar su dieta sin importar lo que dice la báscula. Los famosos "fofisanos"
- "Public Health crisis": en este marco, se presenta a la obesidad como un problema de salud pública garantizando la intervención del gobierno.
- "Responsabilidad personal:" en este punto de vista sugiere que las malas decisiones en la dieta y ejercicio, opuestos a los factores genéticos y sociales, hacen a las personas obesas.
Los participantes que leyeron los dos primeros artículos, decidieron que se puede ser obeso y sano al mismo tiempo, mientras el grupo que leyó los siguientes dos artículos opinaron lo contrario, sin embargo el prejuicio sobre la obesidad y el rechazo al sobrepeso, de acuerdo a una encuesta posterior, solo se redujo un poco en sus respuestas.
Se concluye que el prejuicio persiste después de mostrar investigación científica de que una persona puede tener cierto sobrepeso pero estar saludable. Los investigadores sugieren generar una cultura de salud y justicia social para erradicar o mitigar la discriminación ante un excesos de grasa corporal.
Vía | Chapman University
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