Jamón congelado: sí, se puede, pero este es el truco para que no pierda su sabor

Existe la creencia que el jamón no se debe congelar, pero la realidad es que sí se puede, siempre y cuando sigas ciertos pasos para conservar su sabor, textura y frescura. En Directo al Paladar te explicamos cómo puedes lograr que tu jamón sobreviva al frío y no pierda su sabor.

¿Cuánto puede durar el jamón congelado?

De acuerdo con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, un jamón ya cocido puede vivir en el congelador de uno a dos meses sin perder demasiado su sabor o calidad.

Pero antes de meterlo al congelador, asegúrate que esté en buenas condiciones, pues el hecho de congelarlo no va a mejorar su calidad. Lo que está dañado, está dañado.

Asimismo, el Departamento de Agricultura explica que el jamón tiende a tener menos agua, lo que ayuda a que se formen cristales de hielo grande cuando se congela, lo que favorece una mejor conservación.

Tabla de quesos

Pasos para congelar el jamón sin que pierda sabor o textura

Enfriarlo bien ante de meterlo al congelador

Los expertos recomiendan que el jamón se haya guardado en el refrigerador a una temperatura de 4 grados o menos, antes de meterlo al congelador. Congelar algo que no está frío favorece la formación de cristales de hielo grandes que rompen las fibras y secan el producto.

Envolverlo herméticamente

Puedes guardarlo primero con aluminio, seguido de bolsas herméticas o bolsas selladas al vacío. Cuanto menos aire tenga el empaque, menos se resecará y menos quemaduras por el congelamiento.

Porciones pequeñas

Estamos hablando de consumo familiar, así que lo mejor que puedes hacer es cortar el jamón y guardarlo en pequeñas porciones. De esta forma podrás descongelar cuando quieras la porción que quieres comer. Toma en cuenta que es pésima idea congelas y descongelar.

Compra y congela

No esperes a congelar tu jamón. En cuanto lo compres, pártelo y congela la parte que no comerás, de esa forma te ayudará a que no se pierda el sabor y los jugos se mantengan.

¿Cómo descongelado? Nunca a temperatura ambiente. Esto permite que se descongele lentamente y evita que los bacterias crezcan o que se pierda humedad rápidamente.