Comprar ropa nueva siempre emociona, hasta que llega el momento menos glamuroso del proceso: quitar las etiquetas. Casi todas las prendas vienen sujetas con un pequeño gancho de plástico que muchas personas terminan arrancando con los dientes, cortando con tijeras o, en el peor de los casos, quemando con fuego. Aunque parezca lo más rápido, ninguna de estas opciones es recomendable y pueden terminar dañando tanto la prenda como a ti.
Para empezar, conviene saber que estos “ganchitos” tienen un nombre formal: navetes. Son esos pequeños seguros de plástico que mantienen juntas las etiquetas de precio y composición, y aunque parecen inofensivos, quitarlos mal puede convertirse en una auténtica odisea. Además, hacerlo de forma incorrecta puede dejar marcas visibles en la tela o incluso romperla.
Uno de los errores más comunes es intentar romper el navete con los dientes. Además de poco higiénico, es una mala idea: puedes lastimarte, raspar el esmalte dental o incluso provocar un pequeño accidente. Otra técnica frecuente es quemarlo, pero aquí el riesgo es mayor, ya que el calor puede dañar la fibra de la prenda o dejar manchas irreversibles. Usar tijeras tampoco siempre es la mejor solución, sobre todo si estás en la tienda o si necesitas conservar la etiqueta para un posible cambio.
Navete
La forma correcta de quitar el navete sin lastimar la prenda
La buena noticia es que existe una manera sencilla, segura y rápida de retirar el navete con las manos, sin herramientas y sin poner en riesgo tu ropa nueva.
Lo único que tienes que hacer es identificar la parte superior del navete, que suele tener una pequeña punta o cono. Toma el plástico y empuja suavemente la parte superior hacia abajo. Después, introduce esa punta dentro del mismo cono del navete. Al hacer este movimiento, el seguro se libera y el ganchito se abre con facilidad.
El resultado: las etiquetas salen intactas y la prenda queda completamente libre, sin jalones, sin marcas y sin daños.
Aquí puedes ver el video.
Además de cuidar tu ropa, este truco es ideal si todavía no estás seguro de quedarte con la prenda. Muchas tiendas no aceptan cambios ni devoluciones si las etiquetas están rotas o faltan, incluso con ticket de compra. Al retirar el navete de forma correcta, conservas todas las etiquetas en perfecto estado.
Así que la próxima vez que estrenes ropa, ya lo sabes: no lo rompas, no lo muerdas y no lo quemes, solo sigue los pasos anteriores y listo.
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Imágenes: Directo al Paladar/ creadas por IA de Gemini
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