Si estás buscando una receta con la que todos en casa te pidan “¡otra vez la misma!”, esta sopa de fideos con albóndigas es la indicada. Casanova Cooks reveló su secreto para que quede más rica que nunca y aquí te lo comparto paso a paso.
Además de reconfortante, esta sopa es perfecta como plato fuerte: gracias a las albóndigas, es una receta completa y llena de proteínas. Prepárate para un platillo casero con sabor a abrazo (y a domingo).
El secreto
El truco de Casanova Cooks está en freír las albóndigas antes de incorporarlas al caldo. Así quedan bien cocidas, doraditas por fuera y jugosas por dentro. Es un pequeño paso que hace toda la diferencia en el sabor.
- Forma las albóndigas:
En un tazón mezcla la carne molida con sal, pimienta, comino y mostaza Dijon. Agrega un chorrito de aceite de oliva y mezcla bien con las manos hasta formar bolitas.
- Sella las albóndigas:
En una sartén con un poco de aceite, fríelas durante dos minutos por lado. Solo queremos dorarlas, no cocinarlas del todo. Retíralas y reserva.
- Prepara la base del caldo:
Licúa jitomate, cebolla, ajo, una pizca de sal, pimienta y un poco de caldo de pollo (en polvo o casero).
- Sofríe el fideo:
En una olla con aceite, fríe el fideo hasta que esté doradito. Luego añade el jitomate licuado y deja que hierva unos minutos.

- Agrega las verduras:
Incorpora calabaza, zanahoria, papa y unas hojas de cilantro. Cocina 10 minutos a fuego medio.
- Integra las albóndigas:
Devuélvelas a la olla y cocina otros 10 minutos, hasta que el caldo espese ligeramente.
Sirve caliente, con aguacate rebanado, un toque de chipotle, queso rallado y unas gotas de limón. Acompaña con tortillas de maíz y termina la comida con un flan casero o un arroz con leche.
También te puede interesar: Sopa de boda italiana, el platillo que comen en dicho país para sanar cualquier mal (hasta de amores)
Ver 0 comentarios