El brócoli tiene una mala fama, aunque su apariencia parezca divertida, pues parece un árbol, muchos niños —y también adultos— prefieren mil veces unos tacos, una hamburguesa o hasta un buen hot dog antes que servirse un plato lleno de este “arbolito verde”. Y aunque es una verdura cargada de vitaminas, minerales y fibra, su sabor fuerte y ese olor que a veces aparece al cocinarlo no lo hacen tan popular.
De hecho, un estudio publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry explica que las enzimas presentes en las verduras del género Brassica (como el brócoli, la col y la coliflor) reaccionan con las bacterias de la saliva y producen compuestos sulfurosos que no a todos les agradan. Pero la buena noticia es que con la técnica adecuada, el brócoli puede transformarse en un platillo delicioso y hasta antojable: capeados.
El error más común al capear brócoli
Si alguna vez has intentado preparar brócoli capeado, seguramente te pasó que quedó aguado, grasoso o sin textura. El secreto está en que el brócoli suelta mucha agua al cocinarse, y esa humedad arruina el capeado. Pero aquí es donde entra el consejo de un experto que sabe cómo sacarle provecho.

El truco del chef Alex Marugán
Alex Marugán, cocinero español, ha sido reconocido por su manera de convertir platos sencillos en algo memorable. En su cocina, el brócoli es uno de los protagonistas, y su truco para que quede perfecto es muy fácil de aplicar en casa:
Compra el brócoli y guárdalo en el refrigerador durante dos días antes de usarlo. Esto permite que pierda parte del exceso de agua.
Córtalo en “arbolitos” y fríelos directamente en aceite caliente (180-190 °C). Al entrar en contacto con el aceite, quedarán crujientes por fuera y suaves por dentro.
Espolvorea con sal y comino, o si quieres darle un toque distinto, mezcla con un poco de kimchi y ralladura de limón.
Así de simple: con solo dejarlo reposar en el refri y freírlo bien, evitarás que el capeado se aguade.

Brócoli crujiente al estilo mexicano
Lo mejor es que este truco no solo sirve para imitar la receta del chef, también puedes darle tu toque casero: añadir chile en polvo, unas gotas de limón, salsa macha o incluso acompañarlo con crema y queso rallado, muy al estilo mexicano.
La próxima vez que prepares brócoli, no lo veas como “el vegetal aburrido”: con este tip, puedes lograr un plato crujiente, sabroso y que hasta los más escépticos de la mesa van a querer repetir.
También te puede interesar: Cómo hacer 1 litro de salsa macha con semillas
Ver 0 comentarios