Maciel BG
EditoraRedactora especializada en multimedia y cultura. Me encanta la gastronomía, en especial la comida mexicana y la respostería.
Pocas cosas se comparan a caminar por el tianguis o la calle y detenerte por el delicioso aroma a gorditas de nata recién hechas: doraditas por fuera y muy suaves por dentro, con ese sabor a leche condensada que se queda en el paladar por varias horas. Si tú eres fan de estas delicias esponjosas, tenemos buenas noticias para ti: puedes hacerlas en casa y te aseguramos que quedarán igual de deliciosas.
Solo necesitas 8 ingredientes para preparar estas gorditas de nata caseras. No te preocupes, se trata de una receta sin horno, así que será mucho más fácil de lo que te imaginas. En solo 45 minutos probarás una gordita tan esponjosa que hasta tu familia y amigos te pedirán docenas para llevar.
¿Qué tipo de nata usar para que las gorditas queden más esponjosas?
La nata tradicional es aquella que aparece en la leche hervida, es la más usada en recetas y la específica para preparar gorditas. También puedes usar nata comercial, crema para batir espesa o incluso crema ácida, aunque esta última puede cambiar el sabor. Lo más importante es que tenga un buen porcentaje de grasa, ya que eso les da un toque de mantequilla y textura suavecita que se derrite en tu boca.
Nata para montar. Foto: Freepik
El secreto para darles sabor casero
Para darles un sabor casero y tradicional a tus gorditas de nata lo que tienes que hacer es espolvorearles un poquito de azúcar encima justo antes de sacarlas del comal. Recuerda que también puedes rellenarlas con nata extra, dulce de leche o queso crema con un poco de fruta picada.
Gorditas de nata con mermelada de fresa. Foto: Freepik
Mezcla los ingredientes secos en un tazón, es decir, la harina, el polvo para hornear, el azúcar y la pizca de sal.
A continuación, incorpora la nata, el huevo y la vainilla. Mezcla todo perfectamente hasta formar una masa suave y un poco pegajosa. Si la sientes muy seca, añade una cucharada extra de nata o leche.
Amasa por unos 2 o 3 minutos hasta que la masa esté uniforme. No debe pegarse tanto en tus manos.
Toma porciones del tamaño de una cuchara grande, forma las bolitas y aplánalas suavemente con las manos para darles la forma de una gordita. Asegúrate de que tengan unos 8 centímetros de diámetro.
Caliente un comal o sartén antiadherente a fuego medio y engrasa ligeramente con mantequilla o aceite.
Cocina las gorditas por 3 o 4 minutos de cada lado hasta que estén doradas y bien cocidas por dentro.
Sirve las gorditas de nata casera mientras estén calientitas. Acompáñalas con un poco de leche condensada, cajeta o mermelada y con un café de olla calientito.
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