Oficialmente, nosotros inauguramos nuestra temporada de recetas navideñas, para que cuando llegué lo bueno ya sepas planear tu menú con entradas, guarniciones, plato fuerte, ensalada, drinks, postres y hasta botanitas. Hoy enseñaremos cómo hacer unos raviolis crujientes de calabacita en freidora de aire como entrada para la cena de Navidad.
Verás que en estas semanas te volverás experto o experta en la planeación de menús navideños, que incluso puedes adaptar para recetas del día a día.
Consejos para hacer ravioles, sobre todo si es la primera vez que lo haces
Cuando se trata de pastas -sabemos- que es primordial el buen manejo de la masa. Tendrás que amasar y amasar con cariño y dedicación para que tenga una textura adecuada.
Recuerda que en ciertas áreas de la cocina debemos de respetar las cantidades al pie de la letra, sobre todo cuando se trata de pastas y de postres para hornear, y en este caso no es la excepción, por lo que te recomendamos seguir la fórmula de la receta de abajo.
Para sellar los raviolis no se necesitan máquinas específicas pese a que existen, si no las tienes puedes cerrar las orillas con un tenedor, pero también existen moldes o ravioleras.
Para el relleno vamos a empezar por quitarle el relleno a la calabaza zuccini y lo reservamos para otra receta, en esta ocasión emplear este relleno podría humedecer demasiado los ravioles. Una vez que las mitades estén limpias cortamos otra vez a la mitad y cortamos en láminas de medio centímetro.
En un sartén vamos a agregar un chorrito de aceite, un ajo machacado y una lata de elote amarillo, sofreímos y reservamos en otro contenedor.
En el mismo sartén agregamos las láminas de calabaza, agregamos sal y hierbas finas sin mover mucho las calabazas para que no suelten agua. Van a quedar un poco rostizadas y retiramos del fuego el sartén, pero manipúlalas cuando ya las coloques en la pasta.
Si te quieres saltar este paso puedes sofreír todo junto y procurar retirar el líquido cuando coloques el relleno.
La masa para los raviolis perfectos es un huevo que debe estar a temperatura ambiente (por lo tanto, no lo añadas directamente de la nevera) por cada 100 gramos de harina.
Tamiza la harina para que a la hora de trabajarla será más uniforme y conseguirás una textura de ensueño.
Mezcla los huevos, ½ cucharadita de sal y la harina. Amasa 6 minutos, haz una bola y déjala reposar 30 minutos en el refrigerador con papel film.
Una vez pasado el tiempo de espera, estira una parte de la masa con el rodillo hasta obtener una lámina fina. Reparte porciones de relleno y pincela con agua alrededor. Dobla la lámina sobre el relleno y corta los raviolis con un molde o un cuchillo y cierra las orillas con un tenedor.
Hierve los raviolis 10 minutos en agua con sal y escúrrelos. Mételos a la freidora de aire extendidos, por 4 minutos con un poco de aceite en aerosol.
Una vez que estén crujientes puedes servir y disfrutar los que se te antojen.
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