Maciel BG
EditoraRedactora especializada en multimedia y cultura. Me encanta la gastronomía, en especial la comida mexicana y la respostería.
Cuando llega el otoño, las castañas se convierten en protagonistas de muchas recetas dulces, sobre todo en cremas, postres y chocolates con cacao. Sin embargo, este fruto seco también puede ser una joya en las recetas saladas: su sabor suave, ligeramente dulce y su textura cremosa combinan perfecto con carnes, ensaladas o guarniciones calientes.
Aprovechar las castañas en recetas saladas no solo le da un giro original a tu menú, también es una forma deliciosa de disfrutar su temporada. Aquí te compartimos 3 ideas diferentes para que prepares platillos reconfortantes y con ese toque otoñal que transforma cualquier comida en algo especial.
Puré de castañas con mantequilla y ajo
Si estás buscando una alternativa al puré de papa, este puré de castañas con mantequilla y ajo te encantará. Solo necesitas 300 gramos de castañas cocidas, 2 cucharadas de mantequilla, un diente de ajo, media taza de leche y sal al gusto. Tritura las castañas con los demás ingredientes hasta obtener una consistencia suave y cremosa.
Puedes sazonar con un poco de nuez moscada. Esta guarnición combina muy bien con carnes asadas, pollo al horno o pescados blancos. Además, puedes añadirle un toque de romero o tomillo para resaltar su sabor.
Puré de castañas. Foto generada con inteligencia artificial Gemini
Ensalada tibia con castañas, espinacas y queso de cabra
Las ensaladas no tienen por qué ser frías, y esta versión tibia con castañas salteadas es ideal para los días frescos. Solo tienes que mezclar 3 tazas de espinacas baby, 1 taza de castañas picadas y ligeramente tostadas, 100 gramos de queso de cabra y vinagreta de miel con mostaza.
El contraste entre lo crujiente de las castañas y la suavidad del queso hace que esta ensalada sea un plato completo, nutritivo y con un sabor muy equilibrado. Puedes servirla como entrada o como cena ligera con una rebanada de pan rústico.
Ensalada con castañas y queso de cabra. Foto generada con inteligencia artificial Gemini
Pollo glaseado con castañas y vino blanco
En esta receta, las castañas aportan textura y un sabor dulce que equilibra la intensidad del vino blanco. Sofríe 4 muslos o pechuga de pollo con 2 cucharadas de mantequilla, agrega 1/2 cebolla finamente picada, 1 diente de ajo y una taza de castañas cocidas. Desglasa con 1/2 taza de vino blanco y deja reducir hasta que el líquido forme un glaseado.
El resultado es un plato jugoso y aromático, con un toque otoñal irresistible. Puedes acompañarlo con arroz o una ensalada fresca para balancear los sabores.
Pollo con vino blanco y castañas. Foto generada con inteligencia artificial Gemini
Al preparar recetas con castañas, es importante elegir las que estén firmes y sin grietas. Antes de cocinarlas, hazles un pequeño corte en la cáscara y hiérvelas o ásalas durante 20 minutos para que se pelen fácilmente. Guárdalas en el refrigerador en un recipiente cerrado, y consúmelas dentro de los primeros días para conservar su frescura.
Aprovechar la temporada de castañas en platillos salados es una manera deliciosa de innovar en la cocina. Ya sea en puré, ensalada o como parte de un guiso, este fruto seco puede transformar recetas sencillas en preparaciones dignas de compartir en la mesa.
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