Cada vez son más los hogares en México que apuestan por un diseño de baño sin mamparas, puertas o cristales. Esta nueva tendencia, que puede parecer arriesgada a primera vista, está lejos de ser una ocurrencia pasajera. Las duchas abiertas llegaron para quedarse, y no solo por su estética moderna, sino porque también ofrecen ventajas prácticas que elevan la experiencia diaria del baño.
¿Qué son las duchas sin mampara y por qué están de moda?
Durante años, las mamparas fueron sinónimo de funcionalidad y limpieza. Pero hoy, las reglas están cambiando. Las duchas integradas al resto del baño, sin divisiones físicas, están ganando terreno en el diseño de interiores gracias a su aspecto minimalista y sofisticado. Ya no se trata solo de bañarse, sino de transformar el baño en un espacio visualmente amplio, elegante y libre de obstáculos.
Atrás quedaron los días de los cristales empañados o los rieles oxidados. En su lugar, se busca comodidad, limpieza sencilla y continuidad visual. Las duchas abiertas ofrecen un diseño fluido, sin cortes ni barreras, que aporta amplitud incluso en baños medianos.

¿Y los charcos? La clave está en el buen diseño
Una de las principales dudas al hablar de duchas sin puertas es: ¿no se inunda el baño? La respuesta es no, siempre y cuando el diseño esté bien ejecutado. La clave está en la pendiente del suelo y en un desagüe eficiente.
Los nuevos platos de ducha extraplanos, combinados con rejillas lineales o de canal largo, permiten que el agua fluya rápidamente sin provocar encharcamientos. Además, los materiales actuales —como azulejos antideslizantes y tratamientos impermeables— ayudan a mantener todo seco y seguro.
Sin barreras y con más estilo
Además de funcionales, estas duchas son un acierto estético. Al eliminar puertas y mamparas, el baño se ve más grande, luminoso y moderno. Se gana amplitud, se reduce la sensación de encierro, y se crea una experiencia mucho más agradable.
Para quienes aún prefieren algo de privacidad, existen alternativas como muros de obra parcial, biombos modernos o cortinas textiles impermeables (sí, volvieron, pero ahora con más estilo y mejores materiales). La idea es mantener la esencia del espacio abierto sin sacrificar funcionalidad.

¿Es para todos los baños?
Si bien esta tendencia puede aplicarse en muchos hogares, no todos los espacios son ideales. En baños pequeños o sin buena ventilación, podría requerir una remodelación más cuidadosa. Pero si estás por hacer obra o renovar tu baño, considerar una ducha abierta sin mampara puede ser una de las decisiones más inteligentes y estéticas que tomes.
Minimalismo que se siente como lujo
Las duchas sin puertas ni cristales representan una forma moderna de vivir el baño: práctica, elegante y con menos mantenimiento. En lugar de preocuparte por limpiar cristales cada semana, podrás disfrutar de un espacio limpio, despejado y con un diseño que parece sacado de una revista de arquitectura.
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