Cuando pensamos en salsas verdes, el primer ingrediente que se nos viene a la mente, suele ser el tomatillo. Sin embargo, existen alternativas deliciosas que utilizan chiles frescos como el poblano y el serrano, ofreciendo sabores únicos y versátiles para acompañar tacos, carnes, quesadillas o incluso huevos al desayuno.
Estas salsas verdes destacan por su aroma intenso y su toque ligeramente picante, y son perfectas para quienes buscan variar sus recetas caseras. A continuación te compartimos 2 recetas fáciles y rápidas que puedes preparar en casa con chile poblano y serrano, logrando salsas llenas de sabor y color. Serán el elemento perfecto para acompañar tus guisos de la próxima noche mexicana.
Salsa verde de chile poblano
3 chiles poblanos asados y pelados
1/2 taza de cilantro fresco
1 diente de ajo
1/4 de cebolla blanca
1/2 taza de crema o yogur natural
Sal y pimienta al gusto
El jugo de 1 limón
Para preparar la salsa, coloca los chiles poblanos asados, pelados y sin semillas en la licuadora junto con el cilantro, el ajo y la cebolla. Tritura hasta obtener una mezcla homogénea. Agrega la crema o yogur, el jugo de limón, sal y pimienta, y vuelve a licuar hasta integrar todos los ingredientes. Sirve tu salsa de chile poblano para acompañar tacos, pollo a la plancha o como dip para vegetales crudos.

Salsa verde de chile serrano
5 chiles serranos
1/2 taza de hojas de perejil o cilantro
1/4 de cebolla blanca
1 diente de ajo
1/4 taza de aceite de oliva
Sal al gusto
El jugo de medio limón
Para esta receta de salsa verde, primero asa ligeramente los chiles serranos para suavizar su sabor picante, si así lo deseas. Colócalos en la licuadora con el perejil o cilantro, la cebolla, el ajo, el aceite de oliva y el jugo de limón. Licúa hasta obtener una salsa homogénea y ajusta la sal al gusto. Esta salsa tiene un toque más intenso y picante que la de poblano, ideal para acompañar carnes asadas, tacos o los platos mexicanos tradicionales del 15 y 16 de septiembre.

Estas salsas verdes que no llevan tomatillo son un excelente recurso para darle un giro a tus comidas sin complicarte en la cocina. La combinación de chile poblano para una versión suave y cremosa, y chile serrano para una opción más picante, permite variar los sabores y potenciar cualquier platillo mexicano. Con ingredientes frescos y fáciles de conseguir, estas recetas rápidas se convierten en un básico para quienes aman la cocina llena de sabor y color.
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