Cuando hay antojo de alitas de pollo, lo más fácil es pedirlas o salir a comerlas. Pero después de probar este truco de cocina, vas a querer prepararlas en casa todo el tiempo —y hasta te van a pedir la receta—.
Se trata del “wet brine”, una técnica muy usada por cocineros profesionales para lograr alitas más jugosas, tiernas y llenas de sabor, con solo cuatro ingredientes que seguro ya tienes en casa.
¿Qué es el “wet brine” y por qué mejora tanto las alitas de pollo?
El “wet brine” es una mezcla líquida que se usa para hidratar y sazonar las piezas de pollo antes de cocinarlas. Básicamente, permite que la carne absorba humedad y sabor desde dentro, evitando que se seque durante la cocción. El resultado: alitas más suaves y con mejor textura.
Para prepararlo solo necesitas:
Agua
Vinagre
Sal
Azúcar

Estos cuatro ingredientes funcionan en conjunto: la sal ayuda a retener la humedad, el azúcar equilibra el sabor, y el vinagre ablanda las fibras del pollo.
Si quieres darle un toque extra, puedes añadir pimienta negra, ajo machacado o hierbas aromáticas.
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