Quizá los hayas probado capeados, dentro de tamales, en sopas o ensaladas. Lo que quizá no sabías es que los huauzontles son pseudocereales completamente de origen mexicano, que por mucho tiempo fueron consumidos sin saber sus numerosas propiedades nutrimentales.
Hoy te hablaremos de ellas para que, la próxima vez que los pruebes, estés seguro de todos los beneficios que esas ramas verdes con numerosas bolitas en la punta, aportarán a tu organismo.
Qué son los huauzontles
Se trata de plantas comestibles que existen en nuestro país desde tiempos prehispánicos, y que tienen un gran parecido con el epazote, la quinoa, las espinacas y el brócoli. Por mucho tiempo se había pensado que eran cercanos genéticamente con el amaranto; no obstante el chef Irad Santacruz, quien es un reconocido investigador gastronómico, oriundo del estado de Tlaxcala, asegura que no es así. De acuerdo con él, sí son visiblemente similares, pero no tienen parentesco alguno; botánicamente son totalmente diferentes.
Una de las ventajas de este cultivo, es que no demanda demasiadas condiciones para poder crecer de forma adecuada y que se desarrollan muy rápidamente. Por si no lo sabías, la mejor época del año para que lo pruebes es entre julio y octubre, ya que es cuando se le encuentra más fresco en los mercados.
Sus propiedades nutricionales
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Se trata de un vegetal que contiene minerales, como calcio, fósforo y hierro; pero también cuenta con vitaminas A, C, E y del complejo B.
Esto se traduce en un mejor funcionamiento de nuestras capacidades cerebrales –entre ellas, la agilidad mental y la memoria–, así como en representar una buena opción de consumo para personas celiacas o sensibles al gluten, así como para quienes tengan problemas de estreñimiento.
Tips para cocinar
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Si alguna vez has utilizado huauzontles para cocinar, sabrás que un descuido muy leve puede provocar que sepan amargos. Eso es normal, porque contienen cantidades importantes de ácido oxálico, que les da esas notas tan específicas.
Lo único que debes hacer para aminorar esto es poner a hervir en una cacerola agua. Una vez que esté borboteando, mete las puntas de los huauzontles que te vayas a comer y déjalos cocinándose ahí (sin bajar la intensidad del fuego), por cerca de dos o tres minutos.
Una vez que rebanes las bolitas, y ya sea que las capees o las agregues a un guisado, éstas sabrán a lo que tendría que saber la hierba bien cocinada: fuerte, pero no amarga.
Ya que conoces mucho más de los huauzontles, deberías aventurarte a preparar alguna receta tradicional con ellos. El espectro es amplio: desde hacerlos en tortitas y bañarlos en salsa de tomate, hasta adicionarlos a tus omelettes de las mañanas.
Fuentes: Harmonia | About Español
