En México no hay cocina que no tenga un manojo de cilantro en el refrigerador. Esta hierba aromática es básica para darle vida al pico de gallo, realzar el sabor de los caldos caseros o darle frescura a unas quesadillas con salsa verde. El problema es que su duración suele ser corta: en pocos días empieza a marchitarse y perder su color. Pero no te preocupes, porque existe un truco de conservación que pocas personas conocen y que puede ayudarte a mantener el cilantro fresco hasta por un mes completo.
¿Por qué el cilantro es tan importante en la cocina mexicana?
Además de sus hojas verdes, los tallos del cilantro también son comestibles y aportan muchísimo sabor. Se usa en guisos de carne, sopas, ensaladas y hasta en marinados. Es una hierba económica, versátil y esencial, por eso duele tanto cuando tenemos que tirarla porque se echó a perder antes de tiempo.
Método 1: Blanquear y congelar el cilantro
Mucha gente cree que basta con meter el cilantro en una bolsa y congelarlo, pero eso no funciona bien: al descongelarlo queda blando y sin sabor, porque las enzimas que descomponen la planta siguen activas.
La técnica correcta es blanquear el cilantro antes de congelarlo. Aquí te explico paso a paso cómo hacerlo:
Lava bien el manojo de cilantro.
Pon a hervir agua en una olla y prepara un recipiente con agua con hielo.
Cuando el agua hierva, sumerge el cilantro durante unos segundos.
Sácalo de inmediato y pásalo al agua con hielo para detener la cocción.
Escurre y seca muy bien con una toalla de cocina o papel absorbente.
Separa las hojas de los tallos y guárdalas en bolsas resellables (ziplock). Extiéndelas lo más posible para que no se amontonen.
Congélalas en posición horizontal. Así podrás sacar solo la porción que necesites.
Con este truco, el cilantro mantiene su color verde, su frescura y su sabor, ideal para añadir a caldos, sopas o salsas incluso semanas después.

Método 2: Conservarlo en el refrigerador envuelto
Si no quieres congelar, también puedes alargar la vida del cilantro hasta 12 días guardándolo en el refrigerador. Solo necesitas un paño de cocina o papel aluminio:
Lava y seca el cilantro con papel absorbente.
Envuelve el manojo completo en el paño o en aluminio.
Guárdalo en el refrigerador, evitando aplastarlo. De esta manera, se mantendrá fresco y con buen aspecto por más tiempo.
Cilantro fresco todo el mes
Ya sea que lo congeles con la técnica de blanqueado o lo guardes envuelto en el refrigerador, este truco te permitirá tener cilantro fresco para tus platillos favoritos sin desperdiciar ni una ramita. Una solución práctica, económica y perfecta para quienes aman cocinar con sabor auténtico.
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