Aún no es ‘hongosto’ pero ya podemos encontrar champiñones y hongos en todos los mercados de CDMX. Si eres una de las personas que ama consumir este alimento, a continuación, te contamos cómo aprovechar sus tallos a través de 5 maneras de reutilizarlos y no tirarlos.
Esta parte de los champiñones es una de las menos usadas y que suele terminar en la basura, llevándose consigo darle una segunda oportunidad para consumirla y crear platillos delicosos.
5 maneras de reutilizar los tallos de champiñones para no tirarlos
Cuando cocinamos con champiñones, muchas veces retiramos los tallos y los desechamos sin pensarlo dos veces. Pero, ¿sabías que también son comestibles y muy versátiles? Checa estas 5 maneras de darles una nueva oportunidad:
Caldos o sopas: Los tallos de champiñones son perfectos para preparar un caldo o sopa de verduras con un toque umami. Solo tienes que lavarlos bien y agregarlos junto con otros restos de vegetales (como cáscaras de zanahoria, cebolla o apio) a una olla con agua, luego cocina a fuego medio y cuela. Obtendrás un caldo sabroso ideal para sopas, arroces o salsas.
Rellenos para omellets, quesadillas, tacos, tartas o empanadas: Pica finamente los tallos de champiñones y saltéalos con un poco de ajo y cebolla, gracias a su textura son perfectos para rellenar omelets, quesadillas, tacos, tartas o empanada. Puedes incorporarlos a revueltos de huevo, mezclar con espinacas y queso para un relleno de tartas, o combinarlos con otras verduras y carne molida para empanadas.
Para hacer crema de champiñones: Aunque suelen usarse solo los "sombreros", los tallos también aportan gran sabor. Solo necesitas cocinarlos con cebolla, ajo y un poco de mantequilla o aceite, después añade caldo y un poco de crema, y luego alicuar. Obtendrás una crema de champiñones muy rica, sin haber desperdiciado nada.
Picadillo vegetariano: Con una textura que recuerda a la carne molida, los tallos picados finamente pueden ser la base de un picadillo sin carne. Combínalos con papa, zanahoria, chícharos jitomate y especias tal y como la receta de la abuela. Son una excelente opción para quienes buscan reducir el consumo de carne sin sacrificar sabor.
Para un dip untable: Para una opción más sofisticada y deliciosa, transforma los tallos en un dip lleno de sabor. Saltea los tallos picados con cebolla, ajo y tus hierbas favoritas hasta que estén muy combinados. Luego, licúa con un chorrito de aceite de oliva, y queso parmesano.

Consejos para guardar los champiñones y que no se echen a perder
Los champiñones son deliciosos y versátiles, pero también delicados: si no se almacenan bien, pueden volverse viscosos, cambiar de color o perder sabor rápidamente. Te compartimos algunos tips para conservarlos frescos durante más tiempo:
- Evita guardarlos en bolsas de plástico cerradas: Los champiñones necesitan respirar. Si los encierras en una bolsa plástica sellada, la humedad se acumula y acelera su descomposición. En su lugar, guárdalos en su empaque original perforado, en una bolsa de papel o en un recipiente tapado parcialmente con una toalla de papel.
- Usa toallas de papel para absorber la humedad: Coloca una toalla de papel dentro del recipiente donde los guardes. Esto ayuda a absorber el exceso de humedad, que es una de las principales causas de que se pongan viscosos o se echen a perder.
- Guárdalos en el cajón para verduras del refrigerador: El cajón para frutas y verduras mantiene una humedad controlada y protege a los champiñones de cambios bruscos de temperatura.
- Consúmelos pronto: Los champiñones frescos duran entre 5 y 7 días en buenas condiciones, aunque lo ideal es usarlos dentro de los 3 primeros días. Mientras más frescos estén al momento de comprarlos, más tiempo durarán.
- No los laves hasta que los vayas a usar: Lavar los champiñones antes de guardarlos puede hacer que absorban agua y se deterioren más rápido. Si tienen tierra, límpialos con un paño húmedo o un cepillito justo antes de cocinarlos.

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