Comer saludable no es en absoluto complicado. El secreto está en aprender a explotar todo el potencial de los ingredientes que podemos encontrar en casa o conseguir fácilmente. Ni siquiera tienes que gastar muchísimo dinero en la despensa, verás que con estas tres recetas de chayote podrás disfrutar de una comida muy nutritiva sin pasar horas en la cocina.
El chayote es una hortaliza trepadora que los mayas y aztecas conocían muy bien, puesto que además de su peculiar sabor, también tiene muchísimos beneficios para tu salud. Además es muy versátil: se puede comer cocido o crudo; en licuados, en cremas y en guisos; aunque parezca algo modesto y hasta aburrido, te sorprenderás al saber que es un super alimento.
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Es una verdura ideal para consumir en verano, ya que el 90% de su constitución es pura agua. Además es bajo en calorías y alto en nutrientes; sin dejar de mencionar que es una gran fuente de energía para el cuerpo (funciona mejor que una bebida energetizante), ayuda a regular la digestión y fortalece las defensas del cuerpo.
En realidad es una de las verduras que más consumimos en México: es común ponérselo al caldo de pollo, al de res y al mole de olla. Incluso mi mamá solía prepararlos simplemente al vapor, con mantequilla y ajo y quedaban deliciosos. Pero son mucho más versátiles que eso, por esa razón, te compartiremos estas recetas para que explotes todo su potencial.
Pollo con elote y pasta de chayote
Las pastas o noodles hechas a partir de vegetales son una excelente forma de consumir verduras de forma creativa y nada aburrida. Aparte de saludables son realmente fáciles de preparar. Te compartimos esta receta de pasta de chayote, queda muy bien con cualquier tipo de proteína pero te recomendamos acompañarla con pollo y elote.
Es un platillo bastante completo, además es súper fácil de transportar cuando vas a comer fuera de casa. Te recomiendo acompañarlo con un poco de queso parmesano rallado y cilantro fresco picado.
Chayotes a la mexicana
Esta es la clásica combinación que todo buen mexicano conoce: con jitomate, ajo, cebolla y chile verde. Son perfectos para servirlos como guarnición, acompañando alguna proteína como bisteces o pechuga asados. Lo mejor es comerlos todavía cuando están calientes. Puedes servirles un poco de crema y queso por encima. Te compartimos esta receta de chayotes a la mexicana.
Chayotes rellenos de jamón y queso
Esta es una opción ideal para hacer que tus niños coman más verduras. Es muy dulce, suave y se deshace al paladar. Es muy rápido de preparar y le encantará a todos en casa.
- Comenzamos limpiando bien nuestros chayotes. Retiramos las espinas en caso de que tengan y los ponemos a hervir por 20 minutos. Retiramos del fuego, ponemos en agua con hielos y partimos por la mitad.
- Ponemos a precalentar el horno a 180°C.
- Con una cuchara quitamos la pulpa de los chayotes y la picamos. Reservamos las cáscaras.
- Derretimos la mantequilla, sofreímos la cebolla, agregamos el jamón y dejamos que se dore un poco. Agregamos la pulpa de los cayotes y mezclamos. Dejamos que se enfríe.
- Transferimos a un tazón, agregamos crema, un poco de queso rallado, sal y pimienta al gusto. Mezclamos muy bien.
- Rellenamos los chayotes con la preparación que acabamos de preparar y las cubrimos con más queso. Horneamos a 180°C durante 5 minutos o hasta que gratine el queso. Servimos mientras sigue caliente.
