Puede que muchas personas tengamos en casa un cajón lleno de toallas que han perdido su suavidad, tienen manchas rebeldes o simplemente lucen deshilachadas. Sin embargo, antes de mandarlas al bote de la basura, debes saber que el tejido de algodón es uno de los materiales más duraderos y absorbentes que existen. Te compartimos algunas ideas creativas y fáciles para reutilizarlas en casa.
Aunque ya no sean ideales para secarte después del baño, siguen siendo un material perfecto para crear objetos útiles, prácticos y hasta decorativos. Reutilizar toallas no solo te ayuda a ahorrar dinero, también es una excelente forma de reducir residuos y darle una segunda vida a lo que ya tienes en casa.
Cómo reutilizar las toallas viejas
A continuación, presentamos ideas prácticas para darles una segunda vida, ahorrar dinero y cuidar el planeta:
Paños de limpieza: Es la forma más obvia pero efectiva. Las toallas viejas son mejores que cualquier microfibra comprada para absorber líquidos. Corta la toalla en rectángulos del tamaño de tu trapeador plano. Hazles unas pequeñas aberturas para que encajen en los ganchos del soporte. Cose los bordes con una puntada tipo "zigzag" para que no suelten pelusa cada vez que limpies.
Pantuflas de baño: ¿Te sobran toallas gruesas? Puedes crear unas pantuflas tipo spa. Usa unas pantuflas viejas o tus propias sandalias como plantilla para cortar la suela. Corta varias capas de toalla para que sean acolchadas y únelas con una tira del mismo material para sujetar el empeine. Son perfectas para salir de la ducha porque absorben el agua al instante y son 100% lavables.
Toallitas desmaquillantes reutilizables: Deja de gastar en algodones desechables. Las toallas de cara o las partes menos desgastadas de una toalla grande son ideales. Corta círculos pequeños de unos 8 cm de diámetro. Si quieres un acabado más suave, cose un círculo de tela de algodón (como una sábana vieja) por un lado y deja el tejido de toalla por el otro para una exfoliación ligera.
Guantes para "exfoliación": El tejido de las toallas viejas suele volverse un poco más áspero con el tiempo, lo cual es perfecto para la piel. Dibuja el contorno de tu mano (tipo mitón o guante de cocina) sobre dos capas de toalla, dejando un margen de 2 cm. Cose por el borde, voltea la tela y ¡listo! Tienes un guante exfoliante para usar con tu jabón favorito.
Camitas y cobijas para mascotas: Con unas cuantas toallas puedes hacer camas, colchones o cobijas para perros y gatos: Rellena una funda de almohada con tiras de toalla y cose varias capas para crear una colchoneta. Úsalas como base dentro de transportadoras. Son fáciles de lavar y muy resistentes.
Foto: Freepik
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