Comúnmente consumida en tacos, las tripas son un elemento muy valorado entre los paladares mexicanos, sin embargo, existe una forma correcta de lavar la tripa para preparar y comerla en casa.
¿Qué son las tripas y qué tan saludable resulta consumirlas?
En México, es muy común disfrutar la tripa de res o cerdo frita en manteca o aceite, especialmente en tacos, sopes y en alguna garnacha. De acuerdo con Larousse Cocina, estos ingredientes tienen distintos nombres según su origen: al intestino delgado se le conoce como “tripa de leche” y se utiliza para preparar machitos, mientras que, al intestino grueso se le llama “tripa gorda”, ideal para hacer tacos.
"Las tripas de res se han dejado de utilizar por ser un material con riesgos para salchichones y cervelas; las de cordero sirven para elaborar merguez y chipolatas; las de cerdo envuelven las salchichas, salchichones y boudins. El recto del cerdo se destina a los salchichones más gruesos. También existen tripas sintéticas", señala el Diccionario gastronómico.

Por otro lado, Taste Atlas, señala que “las tripas o machitos son un platillo popular mexicano elaborado con intestinos de cerdo o res. Se utilizan principalmente como relleno para tacos, por lo que es común encontrarlos en todo México, especialmente en puestos callejeros y tianguis”, pero también en las taquerías que abren por las tardes y noches.
Estas vísceras suelen cocinarse con grasa, y el secreto para que queden realmente deliciosas está en no sobrecocerlas, ya que pueden adquirir una textura chiclosa poco agradable. Por lo general, se acompañan con cebolla picada, cilantro y salsas picantes. Aunque muchos podrían pensar que es una preparación exclusiva de México, lo cierto es que también se consume en China y en diversos países de Latinoamérica.
Y si te preguntas, ¿qué tan saludable resulta consumirlas? Según la @nutriologa.angelica, las tripas son muy valoradas en la comida callejera mexicana, si embargo, muy pocos saben que aportan proteínas (30 g para hombres y 20 g para mujeres al día), y son ricas en vitamina B12, fósforo y zinc. Estos nutrientes benefician el sistema inmunológico, la salud de piel, cabello y órganos, además de prevenir la anemia y fortalecer huesos y dientes. Por lo que, consumir tacos de tripa con moderación puede ser una opción nutritiva dentro de una dieta equilibrada.
Cuál es la forma correcta de lavar la tripa para preparar y comer tacos caseros
Si estás pensando en consentir a papá este Día del padre con unos ricos tacos de tripa, te compartimos cómo eliminar cualquier rastro de suciedad y olores indeseados para que solo quede el delicioso sabor y textura doradita. Te damos la forma correcta de lavarla:
- Enjuaga:
Saca la tripa del empaque y colócala bajo el chorro de agua. Enjuágala por fuera para quitar cualquier suciedad superficial. Si la tripa viene en forma de "tubo", por ello, es importante voltearla como si fuera un calcetín para poder limpiar bien el interior. Esto es importante, sobre todo, para aquella tripa gorda. Puedes ayudarte de una manguera o el mismo chorro de agua para que se voltee.
- Retira el exceso de grasa:
La tripa suele venir con una capa de grasa pegada. Así que, con un cuchillo sin filo o con las manos, raspa y retira el exceso de grasa tanto del exterior como del interior de la tripa. No es necesario quitarla toda, un poco de grasa le dará sabor al final, pero lo recomendable es la mayor parte.
- Frota con sal:
Una vez que hayas retirado la grasa, coloca la tripa en un tazón grande y espolvorea con sal de grano o sal gruesa. Ahora, con tus manos (o guantes), frota vigorosamente la tripa con la sal y asegúrate de cubrir toda la superficie, tanto por dentro como por fuera. La sal actuará como un abrasivo natural, ayudando a desprender cualquier residuo o mucosidad. Realiza esto durante varios minutos, notará como la tripa va cambiando de color y se siente más limpia. Después de frotar con sal, enjuaga la tripa bajo el chorro de agua fría, retirando toda la sal y las impurezas que se hayan desprendido.
- Ponle vinagre:
Coloca la tripa en un recipiente con suficiente agua, que la cubra perfectamente y añade un buen chorro de vinagre blanco (aproximadamente 1/4 a 1/2 taza por cada kilo de tripa). Deja remojar la tripa en esta solución durante al menos 30 minutos a 1 hora para reducir el aroma. Al momento de utilizarla, deberás enjugarla una vez más y estará lista para hacer tus deliciosos tacos.

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