Laura Ceballos
Editora en JefeLe encantan las historias cuyo personaje principal es la comida. Ha colaborado como content manager y editora en marcas como Grupo Imagen, Canasta Rosa, Olé Interactive y Clarins. Tiene un proyecto en redes llamado @foodiecuriosa en donde cocina y narra.
Cada año me gusta darle un toque diferente a las torrejas (ese postre que recuerda al pan francés) ya sea cambiando el tipo de pan, el líquido con el que las remojo o incluso los toppings que utilizo. Este año, me animé a probar una versión con fresa, una de mis frutas favoritas, y la verdad es que el resultado me encantó.
Para no perder la esencia de las torrejas clásicas, mantuve la mezcla de leche para remojar el pan. La diferencia estuvo en los complementos. En lugar de usar azúcar y canela, utilicé pulpa de fresa obteniendo un postre reconfortante y fresco, a la vez.
El resultado es una torreja húmeda, muy cremosa, con mucha presencia del aroma de la fresa que le da un balance al sabor. Un sutil toque de canela complementa los sabores, redondeando la experiencia placentera.
Con qué otras frutas se pueden preparar estas torrejas
La fresa es un delicioso acompañante de las torrejas, ya que aportan frescura y un toque de acidez que contrasta con la cremosidad y dulzura del pan. Claro que no es la única opción, se puede seguir el mismo procedimiento utilizando otras frutas como:
Manzana verde pelada
Durazno pelado
Piña en trozos
Frambuesas frescas
Moras azules frescas o congeladas
Mango de manila maduro
Gajos de naranja
Cubios de guayaba
Corta las fresas en rodajas de medio centímetro, ponlas en un tazón, agrega tres cucharadas de azúcar y mezcla. Deja reposar en la nevera de 3 a 4 horas, luego cuela y reserva.
Para las torrijas, corta rebanadas de pan del día anterior y ponlas en una bandeja. En una olla, infusiona la leche con azúcar, canela y cáscara de limón. Cuando esté a punto de hervir, apaga el fuego, deja infusionar 20 minutos y cuela. Echa la leche sobre el pan y deja reposar unos 15 minutos, dándoles la vuelta para que absorban bien.
Pasa las torrijas por huevo batido y fríelas hasta dorar bien ambos lados. Tritura dos o tres rodajas de fresa con un poco de almíbar y barniza las torrijas con la mezcla usando una brocha de silicón. Finalmente, pon las torrijas sobre el almíbar de fre
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