En México existen una variedad muy grande de flores comestibles, pero hay una que aunque su nombre suene como si alguien te quisiera jugar una broma, es un ingrediente tradicional en los estados del sureste mexicano como Chiapas y en la comida de la Huasteca especialmente en el estado de Veracruz.
El pito, pitillo o colorín, es una flor que crece en los árboles endémicos de México del género Erythrina conocidos con el mismo nombre, estas son una especie de vainas con semillas rojas y negras, muy vistosas que florecen de agosto a enero; perteneciente a la familia de las leguminosas, el árbol se caracteriza por sus espinas, hojas trifoliadas y anchas, con flores rojas y angostas que se agrupan formando un racimo pequeño que se asemeja mucho a una corona.
Según el Diccionario Enciclopédico de la Gastronomía Mexicana, existen vario tipos de estas flores, como la caribaea, que se consume en la sierra Norte de Puebla, las del tipo herbácea y leptorhiza más comunes en San Luis Potosí o la de tipo Erythrina americana que es el más consumida en México especialmente en el estado de Veracruz.
Un poco de historia...
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El árbol del colorín era sagrado para los aztecas, quienes lo usaban con fines medicinales, tanto las semillas del colorín como sus frijoles tienen una serie de atributos entógenos, por lo que era consumido por estos para supuestamente ver el futuro y ser el portador de todas las artes de la adivinación.
En el Códice Florentino al colorín se le atribuye solo un valor estético; sin embargo, en el siglo XVII Francisco Hernández señala el uso medicinal de esta planta.
“El jugo exprimido y depositado en la boca de los niños produce sueño”, señala Hernández.
En el siglo XX el biólogo Máximino Martínez señaló que este árbol tiene usos medicinales como antídoto, antiinflamatorio y narcótico; además apuntó que podría producir parálisis.
Algunos beneficios para la salud
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Estas flores comestibles que forman parte de la gastronomía nacional, son tradicionalmente agregadas a la sopa de frijoles, preparada en huevo o encurtidos. Según el blog médico Mi geneacol algunas propiedades de esta flor son:
- Los pitos son ricos en fibra dietética y vitaminas A y C.
- Su raíz se utiliza en infusiones para el dolor intestinal y los problemas digestivos.
- Posee una acción calmantes, antinerviosas, anti-hemorrágicas y anti-disentérico.
- Es muy popular por actuar como somnífero natural, por lo que es recomendado para tratar el insomnio.
¿Cómo se consume?
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Esta flor es parte de diversos platillos a lo largo y ancho de la República Mexicana, se puede encontrar en recetas de tamales, chileatoles, chiles rellenos, caldo de habas, enmoladas y mucho más.
Pito con huevo
Esta receta también conocida como pichocos con huevo en el estado de Veracruz, es una comida tradicional de vigilia en Tuxtla Gutierrez capital del estado de Chiapas, esta se prepara con el colorín cocido y revuelto con huevo, cebolla, cilantro y chile.
Tamales con pemuches
De acuerdo al investigador gastronómico, Lesterloon Sánchez, en la Huasteca Baja los nahuas llaman a las flores pemuch o pemuches y las usan para hacer tamales que cocinan con fines rituales como en las celebraciones de Todos Santos.
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Chileatole de gasparitos
En Veracruz, especialmente en Xalapa y sus alrededores suelen hacer un chileatole de gasparitos, nombre que se le da a la flor de Erythrina americana en esta región, el guiso se acompaña de chile ancho, chile seco, guajillos y costilla de cerdo.
Frijoles con pito
En la sierra Norte de Puebla donde se consumen la variedad Erythrina caribaea: cuecen las hojas tiernas en agua con sal caliza y la agregan a un guiso de frijoles con chile.
Foto de portada | Wikimedia commons |
Fuentes | Larousse cocina | Mi geneacol |
