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Pollo en salsa de jitomate y orégano. Receta

Pollo en salsa de jitomate y orégano. Receta
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Siempre he dicho que en la cocina hay que experimentar, hay que atreverse con nuevas recetas, con nuevos sabores, y con nuevas técnicas. Pero en casa, además, siempre me enseñaron a aprovechar los ingredientes que se tienen en la despensa. Y bueno, la historia termina en que esta semana tenía a la mano un par de kilos de jitomate que no tenía planeados, pero que había que usar para que no se echaran a perder.

El resultado, es este pollo en salsa de jitomate y orégano, con un toque del aroma y el sabor italianos. Nuevamente, es una receta de pocos ingredientes, pero llena de sabor.

Ingredientes para 6 personas

  • 6 piezas de pollo sin piel, 1 cebolla blanca, 2 dientes de ajo, 12 jitomates medianos, orégano seco, sal y aceite de oliva.
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Cómo hacer pollo en salsa de jitomate

En una sartén, calentamos dos cucharadas de aceite de oliva y en ella, freímos hasta dorar por ambos lados las piezas de pollo espolvoreadas previamente con sal. Mientras tanto, hervimos los jitomates hasta que sea sencillo desprenderles la piel, para luego molerlos con ayuda de un procesador de alimentos, con 3 o 4 pulsaciones de 1 segundo cada una será suficiente.

Pollo en salsa de jitomate y orégano

Rebanamos finamente la cebolla y el ajo. Cuando el pollo esté bien dorado, lo retiramos de la sartén y en la misma, acitronamos la cebolla y el ajo, aprovechando los jugos que han quedado del pollo. Una vez que comienzan a tomar color, agregamos la salsa de tomate, una pizca de sal y dos cucharadas de orégano seco. Mezclamos hasta integrar y cuando el jitomate comience a sazonarse, regresamos las piezas de pollo a la cacerola, tapamos y bajamos el fuego al mínimo. Dejamos cocinar por 20 minutos más.

Degustación

Servimos el pollo en salsa de jitomate y orégano acompañado de arroz blanco o alguna pasta larga sazonada con mantequilla, y esta vez, nos decantamos por un pan salado tipo baguette para degustarlo. Si es posible, una copa de vino tinto de uva tipo Sangiovese es el ideal, puesto que aunque es pollo, el ingrediente que más resalta en el platillo es el jitomate, que ustedes saben, es un tanto ácido.

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