Evita el arroz apelmazado con este truco de cocina

Existen muchos trucos de cocina para preparar un arroz perfecto. Algunos consisten en cuidar la temperatura al cocinarlo, otros nos dicen que la perfección se esconde en el tipo de grano que compramos. Pero, ¿cómo podemos evitar que el arroz quede apelmazado si ya lo tenemos en la cacerola? Para no desperdiciar ingredientes ni tiempo, te traemos un hack muy sencillo que hará que tu arroz quede suelto, esponjoso y delicioso.

¿Por qué se apelmaza el arroz?

Hay 3 razones por las que el arroz se apelmaza: exceso de agua, moverlo demasiado durante la cocción y no enjuagarlo antes de cocinar. Aunque muchas personas prefieren no lavar el arroz, al no hacerlo, están dejando el almidón superficial en los granos. Esto provoca que al entrar en contacto con el agua hirviendo se expanda y se vuelva pegajoso.

Recuerda que la proporción correcta es 1 taza de arroz y 2 de agua, si agregas más líquido harás que los granos se peguen entre sí y terminarán con una textura pastosa. Por último, solo mezcla el arroz ligeramente al principio, si sigues mezclando durante la cocción, el almidón se liberará haciendo que se apelmace.

El truco viral para evitar que el arroz quede apelmazado

Si tu arroz ya está en la etapa de cocción y notas que empieza a apelmazarse, lo único que tienes que hacer es añadirle un chorrito de jugo de limón al agua de cocción.

La composición ácida de este cítrico ayudará a crear una barrera que impide que los granos se peguen entre sí. Además, el limón le dará un toque más blanco y brillante a tu preparación sin alterar el sabor. No es necesario que exprimas un limón completo, unas gotitas serán más que suficientes para lograr la textura suelta y esponjosa que deseas.

Tip adicional: qué tipo de olla usar para cocinar arroz

Encontrar el tipo de grano correcto parece lo más importante a la hora de hacer arroz. Las mejores variantes son los granos largos o aromáticos, como el basmati o el jazmín, a diferencia de los cortos y redondos, estos arroces tienden a ser más sueltos. Sin embargo, no hay que perder de vista el tipo de olla o cacerola que usaremos para nuestro plato. Lo más importante es que sea un recipiente con tapa, esto es porque debemos dejar que el calor residual absorba el agua una vez que el arroz ya esté cocido.

En cuanto al material, elige una olla de hierro fundido, son conocidas por retener y distribuir el calor de manera uniforme. Si lo que más te importa es reducir la exposición a químicos para tu cuerpo, tu mejor opción será una cacerola de acero inoxidable, revestimiento de cerámica o vidrio. Ahora ya conoces el truco para evitar que el arroz quede apelmazado, ponlo en práctica y sorprende a tu familia.