Algo que casi nadie sabe: este truco con papel higiénico en el refrigerador realmente funciona

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Laura Ceballos

Editora en Jefe

Internet no deja de sorprender con ideas divertidas y curiosas que, al principio, pueden parecer absurdas, pero terminan teniendo cierta lógica. Una de las más comentadas últimamente es poner un papel de baño en el refrigerador. Pero ¿por qué?

A primera vista puede parecer una acción muy extraña, porque sobra decir que el lugar del papel higiénico es el baño, no entre lo que nos vamos a comer, pero este truco tiene una razón de ser y muchas personas lo están aplicando en sus casas. Lo que comenzó como una curiosidad viral, ahora se está convirtiendo en una práctica común en muchos hogares.

¿Para qué sirve el truco del papel higiénico en el refrigerador?

Este truco promete ayudar a reducir y eliminar los olores desagradables que quedan atrapados dentro del aparato. Esto se debe a que el papel tiene una gran capacidad de absorción, lo que le permite capturar las partículas responsables del mal olor en el aire.

Además, este método también puede contribuir a una mejor conservación de los alimentos, ya que absorbería el exceso de humedad, un factor que puede afectar su vida útil. Esta humedad adicional puede generarse por abrir el refrigerador con frecuencia, la falta de limpieza o un almacenamiento inadecuado de los alimentos.

Y los posibles beneficios no terminan ahí: al reducir la humedad, este truco también ayudaría en el mantenimiento del aparato. La explicación es simple: la disminución de partículas de agua reduce la formación de hielo y, en consecuencia, evita un consumo elevado de energía eléctrica.

¿Cuál es el mejor lugar para colocar el papel higiénico?

El mejor lugar para colocar el rollo de papel higiénico es en la parte trasera del refrigerador, bien al fondo, donde actuará como un deshumidificador natural. Este truco sencillo y práctico no solo eliminará los malos olores de tu electrodoméstico, sino que también mantendrá el ambiente seco, reduciendo las posibilidades de formación de moho y hongos, además de ofrecer los otros beneficios mencionados.

Se recomienda reemplazar el rollo cada tres semanas o cuando notes que está muy húmedo, con una apariencia arrugada y oscura. Pero, atención, no uses un rollo de papel higiénico que haya estado en el baño. Lo ideal es que, al comprar un paquete nuevo, apartes una o dos unidades exclusivamente para este uso y las guardes en un lugar seco, como un armario.

¿Esta técnica realmente funciona?

Según Greenlight, aunque no hay evidencia científica sólida que respalde este truco de limpieza, muchas personas aseguran que realmente funciona y que su refrigerador se mantiene con un aroma más fresco. De hecho, algunos afirman que la industria hotelera ha empleado esta técnica durante años.

Los resultados pueden depender de factores como el tipo de alimentos almacenados y la frecuencia con la que se abre el refrigerador. Sin embargo, en general, se considera un método con cierta efectividad, aunque solo por un tiempo limitado y sin grandes efectos contraproducentes.

A título personal, yo lo hice y noté cierta mejoría en el olor, pero no registré el tipo de alimentos que estaban en refrigerador previo a implementar este truco, así que garantizar su eficiencia para mí solo parte de la experiencia, no de algún estudio o método formal.

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