Como tengo la costumbre de decir siempre, es muy útil tener a la mano algunas recetas básicas que te permiten salir de alguna urgencia cuando ya no sabes qué preparar en casa.
La lasaña de salmón y espinacas que propongo hoy es unos de esos clásicos que siempre es bueno saber cómo preparar rápidamente.
Los ingredientes:
Doce hojas de pasta para lasaña, 300g de salmón, un manojo de espinacas frescas, una taza de caldo de pollo, media taza de harina, dos cucharadas de mantequilla, una cucharada de aceite de oliva, sal y pimienta negra molida.
La preparación:
Lavar las hojas de espinacas y picarlas. Colocarlas en una sartén con el aceite de oliva y sofreírlas por unos cinco minutos a fuego medio.
Cortar el salmón en trozos y añadirlos a las espinacas. Revolver, sazonar con sal y pimienta. Dejar cocinar por unos diez minutos revolviendo de vez en cuando.
Derretir la mantequilla en otra sartén, añadirle la harina y revolver. Agregar ahora el caldo de pollo y seguir revolviendo lentamente hasta que la preparación quede homogénea. Reservar.
Engrasar un refractario con mantequilla, colocar un primer nivel de hojas de lasaña, recubrirlo con la mezcla de espinacas y salmón, la cual recubriremos a su vez con la preparación de harina. Hacemos varios niveles sucesivamente hasta terminar con un poco de esa preparación.
Colocamos el refractario en un horno caliente a 180ºC por unos 30 minutos o hasta que la superficie quede bien doradita.
Para una mejor degustación de esta lasaña de salmón y espinacas les recomiendo servirla caliente acompañada de una ensalada y un buen vino tino.
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